Nacional

Centros Reguladores de Urgencias Médicas: objetivo principal atención oportuna a pacientes en estado crítico

Contabiliza más de 137 mil servicios de atención para pacientes COVID-19

A fin de brindar atención oportuna a personas en estado crítico, la Secretaría de Salud cuenta con Centros Reguladores de Urgencias Médicas (CRUM) en 31 entidades federativas, los cuales, desde el 1º de enero del 2020 y hasta el 20 de marzo de este año brindaron 137 mil 358 servicios a pacientes con COVID-19; de ellos, 28 por ciento presentaba cuadro grave. Gabriel García Rodríguez, director del Centro Regulador de Urgencias Médicas de la Secretaría de Salud, destacó que los CRUM de todas las instituciones del sector Salud han trabajado de manera ininterrumpida durante la pandemia, lo cual permitió que en el 2020 se registraran 62,506 servicios; 66,284 en el 2021 y 8,568 en lo que va de este 2022.

Para el caso específico del presente año, las unidades estatales atendieron 107,583; Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), 16,422; Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), 12,100; CRUM federal, 1,190; ISSSTE, 59; y Secretaría de Marina con 4. Cabe hacer mención que ello es posible en razón de una amplia red que vincula a las instituciones de salud pública nacionales y estatales.

Respecto a los pacientes atendidos, el 59 por ciento fueron hombres y 41 por ciento mujeres; de quienes requirieron apoyo ventilatorio, el 8 por ciento fue intubado. Durante este periodo, la Ciudad de México y los estados de Guanajuato y Yucatán generaron más de 10 mil servicios prehospitalarios por entidad.

Los CRUM operan hace más de 20 años para atender reportes de emergencias médicas a través del número de emergencias 911;así como las peticiones de traslado que realiza el personal de salud de aquellos pacientes que requieren atención en una unidad con mayor capacidad resolutiva.

El objetivos de los CRUM es el de brindar atención oportuna a pacientes en estado crítico y optimizar los recursos disponibles mediante servicios organizados con eficacia y eficiencia, ya que al tener acceso a información sobre la disponibilidad hospitalaria para trasladar al paciente a la unidad médica que cuente con los requerimientos para su atención, ya sea en la entidad federativa o donde se encuentra la unidad médica idónea, lo cual permite reducir tiempos de espera y riesgos a la salud.

García Rodríguez explicó que derivado de la pandemia del SARS-CoV-2, muchas personas de diferentes estados de la República tuvieron que ser atendidas en los institutos nacionales de Enfermedades Respiratorias, de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán” o en los hospitales generales de México y “Manuel Gea González”, aunque en el país opera un sistema mixto de atención médica prehospitalaria constituida en la Norma Oficial Mexicana, NOM-034-SSA3-2013, Regulación de los servicios de salud, atención médica prehospitalaria.

La NOM-034-SSA3-2013 establece que el CRUM es la instancia técnico-médico-administrativa que aplica la secuencia de las actividades específicas prehospitalarias, en el sitio del evento crítico, el traslado y la recepción del paciente en el establecimiento designado. El propósito es brindar atención médica oportuna y especializada las 24 horas de los 365 días del año.

La cadena inicia con la llamada de emergencia al 911, una vez recibida se transfiere al centro regulador de urgencias médicas para verificar la urgencia médica: posteriormente, el CRUM determina el tipo de unidad médica móvil que se utilizará: terrestre, aérea o marítima y en cuanto la ambulancia hace contacto con el paciente y se atienden las lesiones o enfermedad que esté provocando la urgencia, el personal de primer contacto notifica al CRUM la condición de salud para que el centro determine la unidad médica u hospital más adecuado para su atención.

El funcionario detalló que el CRUM federal realiza servicios de regulación médica; es decir, la tarea de revisión de datos y cruce de información clínica sobre la demanda y disponibilidad prehospitalaria y en unidades médicas. “Regula servicios provenientes de las unidades hospitalarias, la calle o la casa del paciente y distribuye equitativamente el trabajo”, acotó.