Ingreso de casi el 40 por ciento de los trabajadores es insuficiente para adquirir la canasta alimentaria
Aun con la recuperación iniciada en 2018 es necesario mejorar la calidad de los empleos
A pesar de que en los últimos tres años, el poder adquisitivo del salario mínimo en México ha registrado una importante recuperación económica, luego de más de tres décadas de reducción, todavía resulta ser insuficiente, ya que con base en datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), al primer trimestre de 2021, el 39.4 por ciento de la población ocupada no tenía el ingreso suficiente para adquirir la canasta alimentaria básica.
Frente a ese escenario, para que los trabajadores incrementen sus ingresos resulta fundamental mejorar el nivel educativo, variable crucial para mejorar la calidad de los empleos impulsada en China, Singapur y Corea del Sur, sostuvo la doctora Josefina León León, académica de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), plantel Azcapotzalco.
Para este 2021, la población económicamente activa en México se ubica en 56 millones de personas y 41 millones corresponden a la población económicamente no activa; de aquellas ocupadas más de 15 millones son parte de la economía informal y en el sector formal trabajan poco más de 38 millones.
Según el Coneval, 32 por ciento de ellos ingresó menos de un salario mínimo y 40 por ciento devengó entre uno y dos salarios mínimos; en tanto, los desocupados suman 2.4 millones, razón por la cual “tenemos un mercado laboral frágil”.
Las políticas que impulsa la globalización económica desde las últimas dos décadas del siglo pasado han disminuido notablemente el poder de los estados nacionales y los ha hecho débiles ante el poder del capital trasnacional.
“En esta etapa hay un repunte de populismos, sobre todo de derecha, y una caída en las ideologías que legitiman el poder de los Estados y en el mercado financiero se ha incrementado el capital financiero especulativo en detrimento de la inversión productiva y la generación de empleos”.
“En la teoría de la macroeconomía el enfoque clásico señala que el desempleo se genera por la existencia de un salario real alto, por lo que para combatirlo se debe reducir la capacidad de compra de los trabajadores y el poder de los sindicatos para que las empresas aumenten la demanda de trabajo, mientras que desde un enfoque keynesiano y poskeynesiano se genera debido a una demanda agregada insuficiente, por lo tanto, el gobierno debe intervenir con políticas expansivas que aumenten la demanda agregada y con ello la producción económica y mayor empleo”.
El mercado laboral en nuestro país, sostuvo, se reportan tasas menores de desempleo abierto comparado con Estados Unidos y Canadá, con base en datos del Banco Mundial, y también en las últimas décadas, en relación con países de América Latina como Brasil, Colombia, Chile, Argentina y Venezuela el desempleo abierto reporta una tasa menor en México y solo Perú tiene un comportamiento mejor, en tanto que por las crisis de 1994 y de 2008 se advierte que el índice de desempleo se incrementó en México, para 2020 éste creció por los efectos de la pandemia de la COVID-19.
En el presente año el nivel de actividad económica en el país reporta un estancamiento con una relativa estabilidad de precios, que en los meses recientes se han disparado, mientras que en 2020, como consecuencia de la pandemia México tuvo una caída del Producto Interno Bruto de 8.2 por ciento, en tanto que en Estados Unidos el descenso fue de 3.5 por ciento, finalizó la investigadora del Departamento de Economía de la UAM-Azcapotzalco.